domingo, 14 de diciembre de 2008

ESCLAVITUD O CAMBIO

Cualquiera que haya estado un trimestre en clase de Filosofía de Bachillerato conoce “El mito de la caverna”, de Platón, y sabe que éste sigue vigente y aplicable a múltiples circunstancias de la vida. La cuestión que podemos debatir es porqué nos cuesta tanto asumir que somos esclavos y abandonar ese rol.

Si lo planteamos desde la óptica del ciudadano medio, parece fácil concluir, después de un ligero análisis, que estamos sometidos al papel de esclavos, por ejemplo, cuando nos dejamos manipular por los medios de comunicación, por los análisis de los economistas, por las críticas de los políticos, etc. Aún así, no hacemos nada para liberarnos de esas ataduras y a pesar de tener la posibilidad de buscar medios alternativos para informarnos, aunque podamos desconectar cuando sentimos que se burlan de nosotros, incluso pudiendo votar por propuestas alternativas, ahí seguimos consumiendo como ellos quieren.

Creo que la primera causa por la que seguimos manteniendo la esclavitud es la inconsciencia en la que vivimos: el esclavo ni siquiera sabe que lo es. Éste es el mejor de los estados posibles para quienes manipulan, contar con sumisos que no presentan batalla alguna.

El segundo motivo es nuestra pereza. Sabemos que salir de la caverna necesita un esfuerzo por nuestra parte y no siempre estamos dispuestos a hacerlo, así que nos conformamos con lo que tenemos: las migajas de la esclavitud.

Un tercer motivo puede ser el miedo a los cambios, en la línea planteada por Erich Fromm cuando aseguró que el individuo se ha vuelto pasivo porque ha convertido su propia vida en un bien de consumo, en un capital que ha de ser bien invertido, asumiendo muy pocos riesgos.

También somos esclavos porque nos conformamos con nuestro momento de gloria y para tenerlo somos capaces de todo, incluso de vivir cautivos el resto de nuestra vida o hasta de asesinar por ello.

Es igualmente determinante el prurito personal, nuestro orgullo, que nos impide reconocer el valor de quienes nos dicen que abandonemos ese estado de esclavitud y aceptemos la invitación. Por eso, entre otras cosas, el esclavo puede llegar al extremo de matar a quien le insista en que se libere antes que ceder a sus propuestas.

Según Platón, los que están fuera de la caverna, al menos algunos, debían volver para ayudar a los cautivos. Lo que no advirtió Platón, siempre confiando en que los sabios eran virtuosos y no unos pésimos ciudadanos, es que existía la posibilidad de que los que regresaban a la caverna se quedarían allí sometiendo a nuevos esclavos y poniendo obstáculos a su salida de la caverna. Platón diría entonces que no eran verdaderos sabios, al no ser virtuosos, de modo que la educación falla en sus objetivos.

Platón sufrió la corrupción ligada al poder, pero no la adivinó hasta los extremos antes planteados. Entre el blanco platónico y la negra realidad ¿existe la escala de grises? Keane nota que algo parece moverse: “Everybody's Changing”, pero ¿será en dirección deseada?




11 comentarios:

Anónimo dijo...

Sr. Felipe:

Le felicito por esta serie de artículos. A uno le dan ganas de volver a recibir clases de filosofía, y a seguir preguntándose el porqué de las cosas.

Un saludo.

anita dijo...

Es un tema que da para mucho debido a su riqueza en lo que se refiera a la escencia de lo que somos lo seres humanos. Me sumergi en mis tiempos de estudiante en cursos de filosofia los cuales me sirvieron mucho para enfrentar ciertos sucesos y buscar respuestas referente a mi vida personal, por lo tanto aplaudo tu Blog. Creo que todos somos esclavos hasta cierto punto de lo que dictamina el medio social en el cual nos encontramos.. aunque no lo queramos y/o no lo reconozcamos . Hace un tiempo atras me tope con una persona que me hablaba mucho de que la libertad que el gozaba se la debia a que seguia una religion. Lamentablemente, y segun mi criterio, aunque esta persona se sentia libre, para mi estaba esclavo de diversos prejuicios, miedos, fanatismos y reglas . Creo que cada persona tiene su propia definicion de lo que es la libertad. No hay nada escrito en piedra y no hay receta alguna para obtenerla. Saludos y espero una proxima publicacion. Anita

Lola C. dijo...

No existe la libertad absoluta como no existe la escalvitud absoluta. En condiciones no extremas, que nos impidan ser o estar, siempre somos libres, al menos, de pensamiento, y siempre somos esclavos, al menos, de nuestro pensamiento. ¡Caramba qué coincidencia! lo que nos esclaviza, nos libera.
Como dice Savater, no somos libres de elegir lo que nos pasa, pero sí de elegir cómo responder a lo que nos pasa.
Por esta razón elegimos, o quizás sea más adecuado decir que apostamos, por intentar salir de la caverna o por quedarnos en ella.

Anónimo dijo...

este tema me llega mucho por la letra que estan rica en ideas, en ideas que rondan en nuestra cabeza y a veces no se sabe como explicar,,

Anónimo dijo...

Interesante,el aspecto socioeconomico como determinante guia de nuestras vidas.Buscar el consuelo en el dinero ,la familia,la fe como elementos de apoyo para no enfrentarnos a la nada en nuestra existencia.Pero al final sentimos la nada, el camino de nuestra vida es una tragedia y todo terminara en algun momento.
Todos nuestros valores,creencias independientes,colectivas son nuestra caverna y fuera de ella existe la nada disfrazada de libertad.Quizas somos exclavos por cobardia,los valientes se pierden en la nada.Mi opinion,saludos.

Anónimo dijo...

Realmente solo decidimos donde sufrir: adentro de la caverna ó " afuera" conozco la libertad, pero para disfrutar de ella hace falta saber lo que es conveniente, lo cual es totalmente relativo porque cuando encuentras a otra persona que como tu es "libre" tan solo te dan ganas de regresar a la caverna por lo menos alla existe el consuelo de pertenecer a un grupo mayor, por lo tanto resulta mas aceptable... que darte ceunta del grado al qeu se puede enloquecer cuando no existe mas que lapropia voluntad, incluso la voluntad mas benevola sufre...

zeta dijo...

Pienso que sì, por lo menos en la època de Platòn, aùn ahora, se considera al mal como algo que es ajeno al desarrollo de la humanidad, cuando es algo que va e irà junto a ella siempre. Supongo que pocos han entendido que es màs complicado entender al mal, y eso ha lanzado toda clase de argumentos a favor del bien. Voy a pensar en las palabras de aquì, las encuentro valiosas, pero habrìa que agregar que la dominaciòn y la esclavitud se da en todos, solamente que se muestra màs aparente en una perspectiva de poderes y ubicaciones; y en el fondo el asunto es tan tirante que esos esclavos abrazan esa condiciòn sin màs, no olvidemos que no todos nacen con el poder para mandar. Suerte.

Ulises Chialva (Odiseo Blabla) dijo...

puede ser que en muchos casos la gente esté esclavizada en la caverna, ignorando su propia esclavitud. Pero como señala Hegel en su dialéctica del Amo y el Esclavo: algunos son esclavos voluntarios: ddemasiados temerosos de sus vida como para luchar y morir como amo...

Anónimo dijo...

La filosofía y el arte, dos factores de salvación. Saludos!

Alberto dijo...

Parece que el blog está algo parado ¡Ánimo!

Blog de filosofia

PsiUNLP/Aprendiendo inglés dijo...

Chicos les traigo resúmenes, apuntes y descargas de filosofía y demás. Contiene imagenes, videos, explicación, traduce la página, etc

Chequeen mi blog que es este: http://detodopsico.blogspot.com.ar/